CAPITULO 1: LA INVITACIÓN

Ya habían pasado cinco años y medio desde que los vulturis habían venido, de solo pensarlo sentía escalofríos en todo mi cuerpo, me asustaba mucho pensar que mi familia pudo haber muerto, pero ahora estaba muy feliz con mi familia, la quería más que a nada en el mundo.

Por otra parte estaba Jake, lo quería mucho, el era como mi hermano mayor y confidente, a el le podía confesar cualquier cosa, el a mi me lo contaba todo, nos teníamos mucha confianza, jamás nos guardábamos secretos.

Estaba tan metida en mis ensoñaciones que no me di cuenta de que Jake ya había llegado a casa, ya que no pudo quedarse a dormir, por que la noche anterior había tenido guardia.

Me levante corriendo de la cama y me metí en la ducha, en cinco minutos ya estaba lista, no sin antes vestirme bien, por que de lo contrario mi tía Alice me mataría.
Salí de mi habitación y allí estaba toda mi familia, papá hacia el desayuno, mientra mamá ponía la mesa, hasta que lo vi, allí estaba mi Jake mirando la tele, sin pensármelo dos veces salte encima suyo.

- Hola Jake - era perfecto, todo era perfecto, no le podía pedir nada más a la vida

- Hola pequeña ¿como has dormido hoy? – pregunto con curiosidad

- Bien, pero me hiciste mucha falta -

Ya esta servido nos llamo mi papa

Jake y yo nos sentamos y como de costumbre mis padres nos acompañaron

- Y como sigue Emily - pregunto mi mama ya que Emily hace una semana había dado a luz a un niño

- Bien, y por cierto a invitado a todos los Cullen a una comida con la manada ¿pueden ir? – dijo Jake ansioso

- Por supuesto que iremos - Jake y yo acabamos de comer y nos dirigimos a la casa de los Cullen

- Hola familia – saludamos Jake y yo

- Hola contestaron todos al unísono - Carlisle estaba leyendo el periódico, Esme arreglaba las flores, Emmett pasaba los canales y Rosalie estaba sentada en su regazo, Alice se encontraba en un sillón con la mirada pérdida y Jasper estaba sentado en el brazo del sillón. Ahora que caía en cuenta, para que Alice estuviera así solo significaba que tenía una visión.

- ¿Alice que ves? – Le pregunte curiosa.

- La pregunta es que no veo, porque nos veo a todos preparando para una fiesta o algo por el estilo, pero no se que es o cuando es. – Me contesto mi tía.

- jajajajajajajaja……. – Pensé que era algo diferente.

- ¿Porque te ríes de mi Renesmee Carlie Cullen? – Dijo Alice furiosa

- Lo siento pero es que se por que no puedes ver nada, y es debido a que nos han invitado a una comida con la manada a las 3 pm.

Mi tía se relajo y se fue a su habitación, supongo que iría a preparar todo para lo de esta tarde.
Cogí a Jake de la mano y le transmití “vamos a dar un paseo lobito”, en una fracción de segundos Jake me tenía cogida en brazos y había salido corriendo de la casa.
Ya en el bosque Jake se paro, me dejo en suelo y fue tras unos arbustos a cambiarse, de allí salio un lobo color ladrillo, que me hizo señas para que me subiera en su lomo, yo como una niña obediente le hice caso a su petición.
Jake salió corriendo por el bosque, mediante mi don le dije “Te quiero mucho”, de su garganta se desprendió un aullido de felicidad.

Al poco tiempo que llevábamos corriendo sentimos un olor de una manada de ciervos y sentí arder mi garganta, ya que yo siempre había preferido la sangre a la comida humana, no me di cuenta, pero le había transmitido todos mis pensamientos a Jake.

Jake entendió que quería casar y paro para que me bajara de su lomo, a el no le hacía mucha gracia, pero lo hacía por mi.

Cuando acabamos nos dirigimos a donde mi tía Alice, ya que nos debería estar esperando, para vestirnos.